VÍDEO BLOG #Miedodequé?: ¿Qué escándalo le dará la puntilla?, por Víctor J. Hernández Bru.
A estas alturas de la película, la duda es saber cuál de los mil y un lodazales en los que está metido el presidente del gobierno, Pedro I El Falso, en un país de pactos con independentistas, golpistas, filoterroristas y sediciosos, de promesas de que no habrá indultos ni amnistías que luego se producen, de choriceos varios presuntos y comprobados, le va a obligar a dimitir y convocar elecciones.
Y tiene pinta de que sí, de que aunque llevemos casi seis años sumidos en un estado no sé si pre-bolivariano o pro-bolivariano, donde los okupas, los inmigrantes ilegales, los prófugos de la justicia y los que señalaban a quién tenían que asesinar los terroristas de ETA tienen más derecho que la gente normal de a pie, que se gana la vida honradamente, finalmente el que se lo va a llevar por delante es un caso de presunta corrupción, presunta pero más que evidente, de su señora esposa, del que es difícil pensar que él no forme parte.
Llevamos ya mucho tiempo leyendo, escuchando, investigando y constatando que los comportamientos del presidente del gobierno son más propios de un dictador bananero que de un dirigente democrático y esto de Begoña Gómez no es una excepción.
El tipo que ha sido capaz de romper relaciones diplomáticas con un estado soberano y hermano como Argentina porque el presidente de éste ha dicho lo que la evidencia canta, que su esposa ha trincado, presuntamente claro, faltaría más, hasta ponerse como el ‘tío Tenazas’, lleva meses apuntando con su ‘kalashnikov’ institucional tanto a los jueces que investigan lo que es más que una evidencia de presunta corrupción como a los medios de comunicación que nos hacemos eco de la misma.
Seguramente, algún día no muy lejano, tengamos que hacer un esfuerzo para que nadie olvide que este señor y este partido, el PSOE, quisieron hacer leyes para que los periodistas no pudiéramos señalar la charca en la que tan bien se han estado moviendo durante años los Koldo, Álbalos, Tito Berni y su sucursal almeriense llamada ‘el gallo del corral’, Begoña, Delcy, Barrabés, Hidalgo, Illa, Armengol y el propio presidente del gobierno, entre otros muchos.
Pero para que llegue ese momento, aún tenemos que hacer un ímprobo esfuerzo, incluso en un estado democrático como éste en el que estamos, para que la Justicia pueda actuar libremente y desarrollar su trabajo sin ser objeto de cartas abiertas a la ciudadanía por parte del máximo dirigente del poder ejecutivo, el presidente del gobierno, acusando a otro de los tres poderes del estado, el judicial, de tratar de condicionar las elecciones del domingo, como hizo este señor ayer martes.
Estamos cerca e, insisto, ahora la pregunta es cuál de los escándalos que algunos llevamos años denunciando le va a dar la puntilla y, sobre todo, cuándo va a suceder eso. Repito, queda el esfuerzo final, para devolver a esta pandilla al lugar de donde nunca debieron salir.
