VÍDEO BLOG #Miedodequé?: CSIF se cabrea porque se desvelan sus mentiras y le toma la delantera a Pedro I El Falso: “al que me critique, le retiro la publicidad”. ¡Pues vamos!, por Víctor J. Hernández Bru.
Estamos en una semana dura para los medios de comunicación, para la libertad de prensa y para el derecho a la información que tienen los ciudadanos. Yo, como periodista absolutamente libre y que no se para ante nada ni ante nadie, la verdad es que tengo ya un máster en ataques y defensas, pero la realidad es que hasta ahora, desde que murió Franco, nadie se había atrevido a ir tan lejos como Pedro I El Falso-Pedro Chapote, tratando de crear una ley de control a la publicidad en la semana en que su mujer es llamada a declarar como imputada gracias al trabajo de investigación de los medios.
Pero esto es tan viejo como el hilo negro. Políticos tratando de coartar la libertad de prensa bajo amenaza de limitar la inversión publicitaria pública es tan viejo como la política. Pero no sólo de políticos. Es evidente el uso que los sindicatos hacen de los fondos públicos que reciben para tratar de comprar voluntades en los medios, aunque realmente no había visto un caso tan evidente y descarado como el de CSIF esta semana.
Con CSIF hemos mantenido, en esta casa, una relación bastante cercana durante años. No me gustan los sindicatos en general, pero acaso por comparación con los sindicatos dependientes de partidos de izquierda, hemos mantenido una colaboración que yo llegaría a calificar de agradable: los hemos entrevistado de vez en cuando, les hemos reprochado ciertas faltas de precisión y rigor, típicas del sindicalismo, pero que podíamos considerar ‘blancas’ al no estar asociadas a ningún partido; y hemos tratado de conocer su actividad, lo confieso, en parte para intentar comprender el mundo sindical.
De un tiempo a esta parte, y así se lo he hecho saber a su presidente en Almería, Juan Fernández Cabezas, CSIF ha venido radicalizando su discurso sobre la sanidad andaluza con mucha carga de mentira. El colmo ha sido una concentración realizada en Bola Azul protestando por el “despido” de matronas, grave mentira porque no ha habido ningún despido sino no renovación de contratos, pero además ocultando que es un segmento profesional que ha incrementado su número de contratos en un 84% en cinco años y que, además, buena parte de esas profesionales no renovadas han recibido oferta para trabajar en el Plan Verano.
El culmen de esta entrega a la mentira del sindicato CSIF fue la intervención de su liberado sindical sanitario Manuel Martínez en Interalmería en lunes, en una entrevista en la que prácticamente fue mentira todo lo que dijo. Volvió a hablar de despidos para referirse a contratos no renovados, buena parte de los cuales en realidad son de profesionales que han recibido otras ofertas de contrato; habló de reducción de plantilla en Almería, cuando entre 2018 y 2024, la plantilla de profesionales sanitarios en Almería creció en un 8,3 en médicos, un 13,63 en residentes, un 20,43 en enfermeros, un 8,77 en celadores, un 55,17 en fisioterapeutas y disminuyó en un 25% en directivos; habló también de profesionales mal pagados cuando se ha incrementado la retribución media un 14% en estos años, con una inyección de 330 millones de euros y respondió, como si fuera un niño de párvulos, que “yo ese dinero no lo he visto”. Y defendió el mendaz porcentaje del 75% de seguimiento de la huelga, cuando las cifras oficiales reflejan en torno al 5% según provincia, justificando que la gente no va a la huelga porque “eso le toca el bolsillo”. O sea, que el señor Manolo lo que quiere es ir a la huelga y que los ciudadanos le paguemos como si estuviera trabajando.
Al día siguiente, di cuenta de esta vergonzosa comparecencia en este humilde #VideoBlog, sin ningún insulto al señor Manolo (puede comprobarse en este enlace: https://www.esradioalmeria.com/2024/07/03/video-blog-miedodeque-tengo-una-mala/) y ayer, el presidente de CSIF Almería, Juan Fernández Cabezas, con quien repito que hablo y mensajeo habitualmente, mismamente varias veces esta semana, me envió una carta como si no me conociera de nada, para decirme que “a tenor de la orden de publicidad consentida por CSIF (…) y debido a cambios de planes estratégicos en el márketing de nuestra organización, se ha decidido por parte de esta unión provincial prescindir de sus servicios de publicidad”. Es decir, que en CSIF, cuando los pillan en flagrantes mentiras, en lugar de pedir perdón y tratar de corregirse, prefieren optar por matar al mensajero.
Mira Juan, como yo no soy como tú, yo te lo voy a decir claro, a la cara y sin cartitas: además de no tener ningún aprecio por la verdad, mantienes comportamientos absolutamente ridículos, a la par que totalitarios. Tratar de comprar nuestra línea editorial con publicidad no sólo es indigno y vergonzoso, sino absurdo, porque todo el mundo sabe que tenemos ideas propias y jamás nos dejaremos comprar por nadie. Y achacar la suspensión de esta campaña a esas gilipolleces que dices no te puede dejar más en ridículo, cuando la decisión llega un día después de que te has sentido ofendido porque hemos desmontado las mentiras del pobrecito Manolo Martínez al que, por cierto, no he insultado ese artículo, lo cual te he dicho en conversación privada y ni eso eres capaz de reconocer, insistiendo en que sí le he insultado. ¿Podrías decirme dónde?
Pues aquí tenemos a CSIF, al menos a CSIF Almería: otro sindicato que trata de chantajear a los medios con publicidad para que no desvelen sus mentiras. Como casi todo el mundo sabe (todo el mundo a excepción de Juan Fernández), aquí ha pinchado en hueso. No era muy difícil preverlo, Juan.
